ES EL ESTADO ¡ESTÚPIDO!

Visto y considerando las variopintas opiniones sobre los últimos hechos políticos que afectan el devenir de la democracia (flor de frase, ¿verdad?) voy a ser lo más claro posible: Macri (que es Mauricio) o Macri (que es Franco) pueden ser acusados de delincuentes (aunque para muchos de ustedes DEBEN ser acusados de delincuentes), pero, antes de proceder a acusarlos, debemos dejar en claro un viejo apotegma que reza ¨la ocasión hace al ladrón¨.

Y nunca tan bien aplicado a este caso, porque aunque afirmemos declaremos y gritemos que TODO EL CLAN MACRI forma parte de una mafia dedicada al robo o a la estafa del dinero nacional, no podemos dejar de lado el rol del Estado en este caso (o cualquiera que recordases) por permitir ser estafado, robado y por qué no, ser mancillado en su honor.

LA OCASIÓN HACE AL LADRÓN.

Y no comparto las elucubraciones acerca si se nace o se hace. Ahí no cedo un tranco e´ pollo. Y tampoco comparto las opiniones psicosociológicas sobre la evolución del chorro en materia de endilgarle la culpa a la zoociedad o al entorno estigmatizante de la pobreza o la falta de oportunidades, porque chorro, finalmente, se hace.

Y se hace desde el gustito a gloria suprema robando un caramelo en un kiosco, de camino al colegio o perfeccionando esa técnica a través de los años, llegando al paroxismo de afanarse una bóveda de banco habiendo preparado hasta un bote inflable. Y también se hace negociando con un Estado inútil, ineficaz e ineficiente, como los que hemos sabido conseguir… porque ¿alguna vez te preguntaste POR QUÉ EL ESTADO protege y respeta a esta clase de gente mientras a vos (SÍ A VOS), además de robarte con impuestos dignos del primer mundo en uno del tercero, no te da ABSOLUTAMENTE NADA?. Te quejás porque no tenés ni justicia (base de TODO SISTEMA DEMOCRÁTICO), ni educación, ni salud ni seguridad (por los que pagás religiosamente) y (los Macri o quienes sean), GANAN FORTUNAS sin dar NADA A CAMBIO?

Por eso.

Porque el ESTADO se los permite.

Y porque LA OCASIÓN HACE A LADRÓN.

Fijate que el Estado permite regalar las empresas que formaban parte de su patrimonio a cambio de nada, por ejemplo. Reaccioná un poco, por lo menos. De la cirugía hasta el hueso, hasta que duela al ¨ramal que para, ramal que cierra¨, sin que nadie dijera nada. Y esto pasa por algo simple de explicar pero no tan fácil de entender: los que dicen ser Presidentes de la Argentina, más que ser empleados del pueblo, se creen SUS DUEÑOS. Basta recorrer la breve historia nacional para recaer en los muertos de La Patagonia Rebelde, cambiar el signo monetario (de $ a Austral) o la democratización de la democracia (¿?). Presidentes que se preocupan más por su look personal (o por las reformas edilicias de Olivos o La Rosada) que por lo que realmente deberían tener interés.

DEFENDER AL ESTADO, mientras se lucha (no sólo empíricamente) con las organizaciones mafiosas (SOCMA, TECHINT y demás) a las que sólo les interesa seguir robándolo. Y a no negarlo: EL MISMO ESTADO FORMA PARTE DE ESAS ORGANIZACIONES MAFIOSAS: ni concejales o intendentes, o gobernadores, o diputados o senadores, o los mismo miembros del Poder Judicial (quienes serían los máximos responsables), o cualquier funcionario, del rango que fuere, han movido un solo dedo para denunciar esto. Salvo, cuando ¨alguien¨ se olvida de pagar el dinero necesario para acallar las voces en disonancia.

Pensá que no es razonable, ya que hablamos del caso Correo Argentino, que NINGUNA COMISIÓN DEL CONGRESO hay visto nada raro durante 12 años. Y, dejando de lado opiniones políticas a favor o en contra, esto es una verdad indiscutible. ¿Sabés por qué? Simple: hubieran procedido al cobro de la deuda, como corresponde. Sin embargo, quisieron hacerse pasar por héroes quitándole la concesión sin cobrar un solo peso. Lo de las expropiaciones, déjenselo a presidentes de países más subdesarrollados que el nuestro. Necesitamos imperiosamente que la Ley se cumpla en todos sus estamentos y que los responsables del desfalco paguen lo que corresponda.

Con guita.

O con cárcel.

En un proceso judicial expedito y con todas las garantías.
Y en el mientras tanto… ¿quién paga estos costos derivados de la expropiación?

NOSOTROS. Dese el que defiende el choripan como el que lleva orgulloso globos amarillos en el ojal.

Porque con esa guita, el Estado vuelve a hacer negocios con los delincuentes, demostrando una y otra vez su ineficacia, ineficiencia e inutilidad en lo que corresponde a defender sus intereses. ¿No te parece ilógico que, casualmente, los representantes judiciales de Estado SIEMPRE PIERDAN las contiendas legales?

Esa cuestión se contesta per se (por la inutilidad del punto anterior, o por la connivencia entre funcionarios y empresarios).

Macri (o el que fuere que hiciera negocios con el Estado), sabe y conoce MUY BIEN las distintas maneras de estafarlo y cómo salir indemne de cualquier acusación. Ha comenzado como simples ladrones de caramelos y recorrieron el largo camino de la delincuencia hasta transformarse en profesionales de la estafa.

Estamos de acuerdo en que hay que darle un corte tanto a éste como a cualquier otro tipo de robo de estos supuestos ¨empresarios¨ contra el Estado, pero, como estamos acostumbrados a crear ¨comisiones investigadoras¨ que jamás llegan a nada en concreto (todavía no hay nadie preso de resultas de esas comisiones), y como el Poder Judicial que dice ser independiente está pendiente de las órdenes del Ejecutivo (o sus operadores), no le pidan peras al alcornoque.
Tanto Macri (que es Mauricio o Franco) son el resultado de la afición al choreo del Estado.

Y la administración actual se equivoca, de principio a fin, al perdonarle una deuda que ninguna otra administración se atrevió a cobrar.

Porque esto de haberlo nombrado a Macri (que es Francisco, el principal responsable de esa deuda) embajador comercial en China, demuestra todo lo dicho anteriormente.

AL INÚTIL ESTADO ARGENTINO, ¡SALUD!