Leocenis habla claro: Los enemigos del Presidente: Los banqueros
Leocenis habla claro: Los enemigos del Presidente: Los banqueros.
La idea que tiene el presidente Chávez del Estado fue expresada en la
carta que le envió a la Corte Suprema de Justicia en abril de 1999, que
entonces regentaba la doctora Cecilia Sosa Gómez. Esa carta no fue
entendida ayer, ni hoy, que sigue vigente su espíritu. Los banqueros, -los pocos que quedan-, no han calibrado la enorme peligrosidad que significa esa idea que el Jefe del actual régimen tiene de su poder y las absurdas
competencias que cree tener.
Después de citar a Montesquieu, Gaitán, Ratzel, McKinder y Darwin; invocar una "Ley Psicológica de las compensaciones", la "isostasia" de las
masas; una "cartesiana fuerza de transformar la República"; la "energía
detonante y el inconsciente latente"; las "pulsiones óntico-cósmica,
cosmo-vital y racional-social" y al "escenario de causas generales que
dominan el planeta" ; después de todos esos disparates, el Presidente le
recordó a la Corte Suprema de Justicia, que el Estado es él. De manera que
él y sólo él puede dirigir absolutamente los destinos del país.
BANQUEROS.
Aquí han caído varios banqueros: Nelson Mazherane, César Camejo, Eligio Cedeño, Gonzalo Tirado, Pedro Ciliberto, por ahorrarnos una larga lista, mientras otros miran a la izquierda y creen que se salvaran. Si los únicos bancos que hubieran quebrado fueran los de esta pequeña lista, sería aceptable que a estos señores se les tildara de ladrones o de realizar mala gestión. Pero el Presidente, y su gobierno, han tomado para sí, más de 18 bancos, más de 50 casas de bolsas, más de 10 compañías de seguros, fincas, constructoras, y un largo etcétera.
Y lo que no han entendido los banqueros que aún sobreviven, es que esto es parte de un plan, donde unos van primero y otros entraran de último, pero entraran. Lo que el Presidente ha puesto en marcha es un plan para apropiarse del sistema financiero, sin tener que pagar por él. En las bases programáticas del PSUV adoptadas en 2010, los intelectuales del régimen lo plantearon muy claro "el enemigo principal de la Revolución Bolivariana es el imperialismo capitalista, especialmente su centro hegemónico, sus monopolios transnacionales, en particular los del sector financiero,
tecnológico, militar, económico y mediático, por una parte, y por la otra,
la alta jerarquía eclesiástica contra revolucionaria, la oligarquía, las
burguesías apátridas, así como todo sector social que, al igual que
aquellos, le sirva de base social al imperialismo".
DUDAS.
Para que no queden dudas el magistrado del TSJ Fernando Vegas Torrearla con motivo de inaugurarse el Año Judicial, dijo para asombro de propios y extraños : "Así como en el pasado, bajo el imperio de las constituciones liberales que rigieron el llamado Estado de Derecho, …la Corte Suprema de Justicia y demás tribunales, se consagraban a la defensa de las estructuras liberal-democráticas y combatían con sus sentencias a quienes pretendían subvertir ese orden en cualquiera de las competencias ya fuese penal,
laboral o civil, de la misma manera este Tribunal Supremo de Justicia y el
resto de los tribunales de la República, deben aplicar severamente las leyes
para sancionar conductas o reconducir causas que vayan en desmedro de la
construcción del Socialismo Bolivariano".
Digo esto, porque no sólo un extendido como Juan Carlos Escotet cree que el mar no terminará arrasándolo, sino que a él se suman, otros que creen que el uso y abuso de la jaladera de mecate vence y convence. No siempre es así. La historia nos ha enseñado que esos mismos que hoy adulan, mañana les
maldecirán y perseguirán sin cuartel. Así ha sido siempre y así será.
JALAMECATE.
Ninguno de esos banqueros que hoy se columpian ante los escrotos del poder, aceptará estar retozando en el chiquero de la corrupción. El
Superintendente Hernández Beherens, presentado como un nuevo Bayardo sin tacha y sin reproche, tiene una máquina de extorsión - con o sin
conocimiento de él- pero no se salvará nadie, ni siquiera los que le pagan
obligado peaje. Al Capone y John Dillinger cuando disputaban el control de famoso Distrito Nueve de Chicago se enfrentaban ellos mismos, blandiendo sus pistolas en memorables batallas de medianoche. Aquí los contrincantes
venezolanos del delito apelan a una institución vieja de siglos, el
sicariato, pero como son bocones uno se entera.
Lo que no han entendido los banqueros, es que, en el gobierno se
necesitarían la linterna de Diógenes y el catalejo de un almirante para
encontrar gentes puras u honestas. Aquí hay mala intención, dobles y
perversidad, como la hubo con Danilo Anderson, el cual pusieron a volar
por los aires, después que se fue por las ramas. En la escolta de chavismo
hay quienes, como los Borbones de España, ni aprenden ni olvidan. Para
ellos, señores banqueros, ustedes son unos capitalistas de mierda, un tumor
al que hay que extirpar. Sigan creyendo pendejadas. Como les dijo Hugo
"vengan a mí que tengo flores".