La superstición religiosa organizada conocida como iglesia católica "canonizó" a Karol Wojtyla, gran amigo y encubridor del repugnante delincuente Marcial Maciel. Ahora lo hará con Agnes Gonxha alias "Teresa de Calcuta" quien mantenía a los enfermos en condiciones menos que deplorables porque "el dolor le agrada a dios", que nunca aplicó las cuantiosas donaciones que de todo el mundo le llegaban para ayudar a los pobres y enfermos y que en lo personal se hacía atender en los mejores hospitales cuando ella enfermaba.