Hay quienes se han referido a Zabludovsky como "mercenario" sin analizar el contexto en que su labor periodística comenzó en la segunda mitad del siglo pasado. México era otro y le tocó vivir su momento en su momento. Cuando sus convicciones así se lo requirieron no tuvo empacho en dejar la casa que lo acogió por décadas y cuando la democracia se fue abriendo paso y la libertad de expresión fue una realidad en nuestro país, sin duda la ejerció. De lo que no hay duda es de que fue un icono en el periodismo, un referente, lector voraz, no hay capital mundial importante que no haya conocido ni personaje de su tiempo que no haya entrevistado. Ninguno de sus detractores provenga del medio del que provenga tiene ni tendrás jamás la estatura que alcanzó Jacobo.