Esta sí que está buena: un hombre fue arrestado por no usar Twitter. No es un titular sensacionalista ni una tergiversación, sino que así sucedió, como les contaremos.
Resulta que la estrella adolescente Justin Bieber (muy famoso en su barrio parece) tenía agendado un concierto en el Roosevelt Field Mall de Long Island. Sin embargo, fue tal la aglomeración de fans y tan desbandado su comportamiento, que Bieber optó por no salir al escenario. La policía, a su vez, le pidió a James A. Roppo, un ejecutivo del sello discográfico de Bieber (Island Def Jam Records) que ayudara a dispersar a la multitud. Lo extraño es que se lo pidió por Twitter y cuando horas más tarde Roppo fue arrestado, la policía informó:
La policía arrestó al vicepresidente de Island Def Jam Records, quien enfrenta los cargos de negligencia criminal, poner en peligro a un menor y obstruir a la fuerza pública. “Pedimos su ayuda para sacar a la gente mandándole un mensaje por Twitter, y al no cooperar puso en peligro las vidas del público”.
Lo más raro de todo es que al parecer la policía no le mandó el mensaje a la gente del sello, sino directamente a Bieber, el cual acusó recibo y se dirigó a los fans por el mismo canal (que según la policía es omnipresente y por lo mismo totalmente válido):
Pero bueno, en realidad este hecho anecdótico no es lo importante: otras cosas más ridículas pasarán y el mundo seguirá girando, pero qué llamativo ver que hasta la misma policía considera que Twitter es una plataforma oficial de comunicación, tanto que no puedes ignorar una instrucción dada por ese medio so pena de incurrir en obstrucción a la fuerza pública.
Bueno, eso, y notar una vez más que los policías gringos están chalados.